5 maneras de ser un consumidor más consciente
¿Has pensado alguna vez en el poder que tienes cada vez que compras algo? Desde pequeños nos hacen creer que nuestras decisiones individuales no tienen impacto ni importancia, pero en realidad un cambio, por pequeño que sea, puede tener enormes implicaciones. Para empezar, influye en las decisiones empresariales de seguir con la forma actual de producir las cosas o buscar nuevas alternativas. Un cambio en las pequeñas elecciones de compra decide el destino de las marcas que compiten por su dinero.
El poder que tienes como consumidor es enorme. Sin embargo, es importante saber utilizarlo de la mejor manera posible, para que sus acciones puedan tener un impacto real en el mercado y la sociedad.
Es importante recordar que cada vez que compras algo, estás votando. Estás votando por un producto, una empresa o un servicio. Estás de acuerdo con los ingredientes, los métodos de producción y las políticas sociales, medioambientales o humanas que hay detrás de ellos.
Hay varias formas de ejercer este poder de voto. Aquí puedes ver las 5 que consideramos más relevantes:
- Exija transparencia e información en todas las fases de la cadena de valor de un producto y, cuando sea necesario, exija que se modifiquen las actitudes negativas, como las violaciones de los derechos humanos o las infracciones de las buenas prácticas medioambientales;
- Llevar a cabo boicots de consumo : siempre que un producto, marca o empresa no cumpla los valores sociales, humanos o medioambientales, deje de comprarlo y opte por opciones más sostenibles;
- Elija productos certificados o de procedencia conocida : cuando no sepa qué productos comprar o cómo identificar su procedencia, opte por productos certificados (por ejemplo, comercio justo o agricultura ecológica). Compre directamente al productor y apoye a las pequeñas empresas locales;
- Reduce el consumo - por el bien del planeta, reduce tus hábitos de consumo: ¿te has parado a pensar cuántas cosas tienes en casa que (probablemente) nunca utilizas?
- Corre la voz : siempre que descubras un producto que tiene un impacto negativo sobre las personas y el planeta, no te guardes la información para ti. Corre la voz (sin imponer una actitud) e informa a tus amigos o conocidos. Haz lo mismo con los productos que tengan un impacto positivo. El conocimiento es el primer paso hacia el cambio.
Una decisión de compra siempre tiene repercusiones para terceros.